A un año de su implementación, el proyecto financiado por el Consejo Regional, ha permitido que la inclusión y la accesibilidad sea una realidad en el sector costero sur de Arica.
Según el intendente (s) Roberto Lau, las personas en situación de discapacidad, y especialmente con movilidad reducida, pueden visitar y acceder a lugares que en pasadas temporadas estivales eran de difícil acceso como: Las Cuevas de Anzota y el ingreso al mar en las playas “El Laucho” y “La Lisera”.
Marcos Montesinos, encargado del proyecto, evaluó positivamente el plan de gestión que implementa el Club Deportivo Escolar Centro de Capacitación Laboral (CCL), comentando que a través de la inserción laboral, jóvenes del CCL pueden trabajar en el programa y, con ello, mejorar su calidad de vida.
Por su parte, Fiorella Vargas, kinesióloga del joven Pedro Domínguez (38), quien sufre de una hemiparesia, una agresiva enfermedad que generó una parálisis parcial en su cuerpo, comentó que el joven fue un avezado corredor de bodyboard, y el volver a tener contacto directo con el mar es una verdadera terapia para su estado de ánimo y motricidad.
En la misma línea, Elive Padilla, deportista no vidente, comentó su experiencia como usuaria del programa, valorando la iniciativa ya que ahora puede disfrutar del verano y no se queda encerrada en su casa.
“Gracias al trabajo que realizan los monitores me entregaron la confianza para ingresar al mar, pues antes que existiera este programa no venía a la playa porque me causaba pánico estar sola y me encerraba en mi casa. Esta iniciativa del Gobierno Regional nos cambió la vida a mí y a mucha gente que sufre problemas de movilidad”, dijo Elive Padilla.